Se esperaba para hoy un gran partido entre Inter y Lazio en San Siro. Un clásico. Pero no pudo ser, ya que la violencia volvió a aparecer en escena, y se llevó la victoria. Un hincha de Lazio murió antes del partido por un disparo de un policía, y la Federación Italiana -como debe ser- decidió suspender este duelo.
Gabriele Sandri, de 26 años, falleció al recibir un disparo en Badia al Pino, al noroeste de Italia. Iba en camino a Milán, donde su conjunto iba a jugar hoy. Según la policía, hubo un enfrentamiento entre un coche con cinco jóvenes, y un agente de ruta acudió para intentar calmar todo y se produjo un disparo accidental. Además, señalaron que se están estableciendo la dinámica de lo sucedido y cómo ha pasado, así como también expresaron su pesar y dolor por la muerte del joven.
En relación a esta tragedia, se suspendió a los 10' del primer tiempo el encuentro entre Atalanta y Milan, cuando los tifosi locales rompieron el vidrio perimetral al campo de juego con el fin de que no se juegue el partido, y de cierta forma solidarizarse con el hincha muerto.