La incertidumbre reina en el Inter. |
El resultado fue totalmente justo y merecido por los bologneses, que defendieron muy bien, sólidos, ordenados, pese a hacerlo con tres hombres. En el comienzo, en la primera media hora, fue trabado y bastante parejo, donde no abundaron las ocasiones ofensivas; la mas clara fue pasados los quince minutos, que fue un cabezazo de Maicon que Gillet despejó con sus piernas.
Sin embargo, todo comenzaría a cambiar en el minuto 37 cuando Bologna sacó un lateral a la altura del área interista por izquierda para Ramirez, quien dentro del rectángulo le ganó la posición a Lucio, tocó para la zona de la media luna para Pérez; éste se la pasó a la derecha a Marco Di Vaio, quien con un enganche hizo pasar de largo a Nagatomo y de zurda remató al lado del primer palo para abrir el marcador para la visita.
Di Vaio aprovecha el error de Ranocchia y no perdona. |
Este fue un golpe duro para la moral neroazzurra, tanto así que sesenta segundos mas tarde recibiría el segundo gol luego de un grosero error defensivo de Ranocchia, que pagó los platos rotos de todo el equipo. Inter sacó del medio e inmediatamente Bologna recuperó la pelota por derecha y se la pasó cerca del circulo central a Perez; el uruguayo tiró un pelotazo para Di Vaio que Ranocchia podía haber despejado sin problemas, pero que en cambio la paró de pecho dejándosela servida al ex Parma, quien le ganó sus espaldas y definió de derecha ante un Julio Cesar que nada pudo hacer para evitar la caída de su valla.
Il Capitano no puede creer la actualidad del equipo. |
En el complemento se esperaba la reacción del Inter en busca del descuento, sin embargo no cambió mucho la historia. Pese a intentarlo, lo hizo casi siempre sin fe, mientras que los rossoblú se encontraban cómodos, casi no arriesgaron y forzaron a los neroazzurri a jugar con prisas y sin claridad en el ataque. Las mas claras para los interistas fueron: la primera un disparo mordido de Forlán que contuvo Gillet, y la segunda fue un potente cabezazo de Ranocchia que fue despejado nuevamente por Gillet.
Gran jugada personal de Acquafresca para marcar el tercer gol. |
A falta de cinco minutos para el final, Bologna puso cifras definitivas con una jugada personal de Robert Acquafresca, quien - rodeado por ¡cuatro jugadores interistas!- se metió de derecha hacia izquierda y sacó un zurdazo que se incrustó sobre el poste derecho de Julio Cesar.
Un capitulo aparte se le puede dedicar a Ranieri, que realiza cambios sin sentido, como cuando sacó a un delantero para poner a un mediocampista (Poli por Forlán), y luego sacó a un medio para ingresar a un atacante (Castaignos por Faraoini). Ranieri creo que no fue despedido porque la semana próxima visita al Marsella por los octavos de final de la Champions League. Esa es su prueba de fuego, su puesto pende de un hilo. Veremos que piensa Massimo Moratti.
- ¡Taxi! (?). |
Inter 0 - Bologna 3
INT: 1 Julio Cesar; 13 Maicon, 6 Lucio, 23 Ranocchia, 55 Nagatomo; 4 Zanetti, 19 Cambiasso; 37 Faraoni (30 Castaignos 69'), 10 Sneijder, 9 Forlan (18 Poli 61'); 7 Pazzini.
BOL: 1 Gillet; 84 Raggi, 90 Portanova, 5 Antonsson; 8 Garics, 15 Perez, 26 Mudingayi, 3 Morleo; 10 Ramirez (33 Kone 70'), 23 Diamanti (6 Taider 58'); 9 Di Vaio (99 Acquafresca 76').
Goles: Di Vaio 37' (B), Di Vaio 38' (B), y Acquafresca 85' (B).